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Contra la promesa del Gobierno de no aumentar los combustibles por 60 días, había un incremento previsto del 1,3 por ciento para este viernes que quedó suspendido pero solo hasta el sábado, cuando finalmente subirán casi un 5%.
Tras una reunión que encabezó el ministro de Energía, Juan José Aranguren, con las petroleras, trascendió el aumento que comenzó a regir a partir del sábado. Las naftas subieron casi 5 por ciento y el gasoil 4,5.
El ajuste continuará en julio, con otro 3% de aumento. Vale recordar que desde diciembre de 2015 ya se llevaban acumulados 12 aumentos, sin contar los que comenzarán a sentirse en las próximas horas.
Tras la liberación del mercado de los combustibles impulsado por el Gobierno, las petroleras empezaron a actualizar los precios de acuerdo a la variación del dólar y el precio internacional del barril de petróleo; hasta que tras la reciente disparada de la divisa estadounidense, las partes habían acordado congelar los ajustes por dos meses, promesa que quedó en la nada.
Estos nuevos incrementos en los combustibles se trasladarán de manera directa a la inflación, ya que el 93 por ciento de la economía argentina se mueve en camión y la suba del gasoil afecta directamente los costos de logística de las empresas.
